3-TERCERA ETAPA (1872-1912)
NOCHE DE DICIEMBRE (1874)
Noche como ésta, y contemplada a solas,
no la puede sufrir mi corazón:
da un dolor de hermosura irresistible,
un miedo profundísimo de Dios…
Mira ese cielo...Es demasiado cielo
para el ojo de insecto de un mortal:
refléjame en tus ojos un fragmento
que yo alcance a medir y a sondear…
Un cielo que responda a mi delirio
sin hacerme sentir mi pequeñez:
un cielo mío que me esté mirando
y que tan sólo a mi mirando esté.
DE NOCHE (1890)
No ya mi corazón desasosiegan
las mágicas visiones de otros días.
¡Oh Patria! ¡oh casa! ¡oh sacras musas mías!...
Silencio! Unas no son, otras me niegan.
Los gajos del pomar ya no doblegan
para mí sus purpúreas ambrosías;
y del rumor de ajenas alegrías
sólo ecos melancólicos me llegan.
Dios lo hizo así. Las quejas, el reproche
son ceguedad. ¡Feliz el que consulta
oráculos más altos que su dueño!
Es la Vejez viajera de la noche;
y al paso que la tierra se le oculta,
ábrese amigo a su mirada el cielo.